Orgullo
El pelotón se formó lentamente frente al reo, que aguardaba
altivo ante la mirada atenta de los
oficiales. El general dio orden de cargar, apuntar y finalmente gritó fuego. El
cuerpo se agitó con rebeldía antes de caer. Su último deseo había sido dirigir él
mismo su propio fusilamiento.
Muy bueno ese desafío. Grennon estuvo muy certero con este disparo.
ResponderEliminarAbrazos.
Pues sí. Mira que hasta me gusta a mí. Una pena no haber pasado una rondita más, pero bueno, me descabalgó el subcampeón.
ResponderEliminarAbracísimos.