(Imagen: En la red)
Volver a empezar
Ella se perdió en una antigua fotografía, deshilachada por
el alzhéimer. Yo la observo desde tan lejos que ya comprendo que no soy el
fotógrafo. Solo deseo olvidarme de todo también para de nuevo volver a
enamorarnos.
Tierna esperanza de no rendirse y, contra todo pronóstico, encontrar los atajos en el laberinto Barlon.
ResponderEliminarMuy bueno, abrazos.
He intentado que él, resignado, se amoldase al mundo de ella. Hay cosas tan duras que requieren medidas extremas.
EliminarSaludos osete.
Una forma excelente de darle la vuelta a esa enfermedad terrible.
ResponderEliminarPar de abrazos.
Sin palabras me quedo. No me esperaba que alguien como Lola Sanabria se pasase por este cuchitril. Y mucho menos que dejase un comentario, y para más positivo.
EliminarMuchísímas gracias de parte de este ingenuo principiante.
Besos y abrazos.
Que fuerte es el amor que siente para querer desarrollar la misma enfermedad que su mujer. Así vivirán en un mundo parejo, en las mismas condiciones.
ResponderEliminarUn beso
Pues sí, parece que llega un punto en la vida en la que ciertas cosas ya no importan demasiado pero no tiene por que ser así. Y teniendo poco que perder y mucho que ganar...
EliminarUn beso, Bechi.
Se le eriza a una la piel ante tu micro... triste y hermoso al tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo, Barlon!
P.D: por cierto que el nombre de tu blog me recuerda a cierto cuentacuentos... ;-D
Gracias Misne, si realmente te ha causado emoción ya me doy por satisfechísimo.
EliminarY tienes razón en lo del saco, pero sería demasiado abvio ¿no crees?
Un besote, Misne.